Descripción
Puede que esta noche tu plan sea contar un cuento para dormir a un niño, tu intención sea dejarte llevar por las figuritas de una pelota rodando con ritmo infantil, y que, de pronto, te descuenta que esa fábula minimalista te ha removido a fondo. ¡Cuidado! Si tienes despierto a tu niño interior, o si eventualmente le sacas a pasear de su letargo, La Parte que Falta puede inflamar la fibra sensible y dejar una huella difícil de procesar durante unos minutos.
“Los mejores libros infantiles no son escritos para niños, sino apreciados por los niños. Nos hablan de nuestros anhelos y miedos más profundos y tocan humanos de todas las edades (…)la magia de un libro infantil solo funciona en un adulto si este no es un soso y admite que no tiene todas las respuestas para el mundo”. Maria Popova.