Descripción
Acompáñalos a descubrir un escondite secreto, a dar la bienvenida a un ratón encantador al que llaman «el trapero» y a hacer deliciosas tortitas. Visitarán la mejor pastelería del mundo y una tienda donde venden de todo, y encontrarán una cajita de madera llena de tesoros. Y —¡oh, no!— tendrán que enfrentarse a una terrible y espeluznante rata. Los días pasan volando en esta casa tan singular.
La artista Karina Schaapman dedicó años a construir y decorar la Casa de los Ratones, escenario de este álbum infantil tan especial. La preciosa casita está fabricada con cajas y cartón piedra, con telas antiguas y toda clase de materiales reciclados (cerillas, botones, tapones de botella…). Tiene más de cien habitaciones, pasillos y espacios exteriores para explorar. Los ratoncitos que la habitan también han sido diseñados y creados por Karina. Los cuentos de Sam y Julia fueron surgiendo como por arte de magia mientras construía la casa.