Descripción
Magro y a la vez voluptuosísimo, así es el estilo de nuestra autora urugualla. Ni permiso ni perdón por los signos de puntuación galopantes. Ni permiso ni perdón por las reiteraciones desde la página uno, cuando todavía la lectora no sabe que la cosa va del eterno retorno. Ni permiso ni perdón por los dramas de la feminidad narrados a lo «fumando espero». Ni permiso ni perdón por su absoluto desinterés ante eso que el lobby de nuestra profesión (la crítica, las escuelas de escritura –puaf –, los emails redactados por las agentes y por las directoras literarias de las editoriales) ha dado en llamar «la psicología del personaje», patologizando hasta lo que nos sale del grasiento teclado. Irse yendo es, como buena tragedia, oscura y lúbrica.
Con prólogo de Cristina Morales