Descripción
Desvelan que nuestro lugar ha sido siempre vital e imprescindible: desde las esferas desde las que reproducir la vida (cotidiana) y asegurar los cuidados, hasta los modos de ocupar un territorio y gestionar los bienes comunes, o las maneras de establecer relaciones sexo-afectivas entre nosotras que nos permiten cultivar la ternura radical en medio de la crisis continua.